Tanto nos hemos acostumbrado a las declaraciones polémicas de Trump que ahora casi ni nos inmutamos cuando los titulares rezan las últimas barbaridades pronunciadas por su boca.

Sin embargo, nunca contento si no está en el primero plano de los telediarios, parece que el Presidente se ha propuesto superarse a sí mismo, infligiendo todavía más dolor y atacando a los defensores del mismo pueblo que se supone que tiene que dirigir.

Y habrá funcionado su estrategia, pues de nuevo está en el candelero. Según The Atlantic, Trump ha comentado que <<los estadounidenses que perdieron la vida en la guerra son ‘perdedores’ y ‘pringados’>>.

Aparte de la evidente crueldad de semejante declaración, Trump se tira piedras sobre su propio tejado. Las Fuerzas Armadas estadounidenses tradicionalmente han apoyado a los candidatos republicanos y, sin embargo, está perdiendo su respaldo en unas elecciones que prometen ser muy disputadas. Quizá el tiro le salga por la culata en noviembre.

De todas maneras, tampoco es de extrañar que el Presidente en funciones haya despreciado a los que se juegan la vida más allá de las fronteras de su país. Ya lo hizo con el Senador McCain, quien fuera prisionero durante la Guerra de Vietnam, cuando dijo <<No es un héroe de guerra. Lo es, porque fue capturado. A mí me gustan las personas que no hayan sido capturadas.>>

O cuando aprovechó del duelo de la familia Khan, cuyo hijo soldado había fallecido a causa de un coche bomba en Iraq, para hacer comentarios islamofóbicos y machistas y así animar al elemento más fanático de su base electoral.

En cualquier caso, ¿qué más se puede esperar de un señor que evitó el servicio militar de joven en más de cinco ocasiones, con un informe médico -emitido por un amigo de su padre que le debía un <<favor>>- alegando que tenía espolones en el talón?

A Trump le gustarán los desfiles militares, pero servir al país como lo hacen nuestros soldados, no tanto.

Desde Democrats Abroad, denunciamos de forma rotunda la conducta del Presidente. Y vamos un paso más allá, acompañando las palabras con acciones.

La semana pasada, un equipo de diez voluntarios proveniente de Vote From Abroad, en colaboración con DA, se personaron en la base militar de Rota. Su objetivo ha sido facilitarles el voto a los más de 3.000 estadounidenses que residen en la base en aras de proteger su derecho constitucional a elegir los dirigentes de nuestro país.

Estos esfuerzos concretos contribuirán a la esperada victoria de Biden, devolviendo la dignidad a la Casa Blanca, amén del respeto que les es debido a nuestros soldados que tanto han sacrificado.

Puede que Trump tenga espolones en el talón. No se sabe a ciencia cierta.

Pero sí tenemos la certeza de que DA Spain no los tiene, incansablemente llevando a cabo su labor en el campo.

Dándolo todo.

Dando ejemplo.

Como lo haría un buen Presidente.

Como lo hará Biden.